lunes, 7 de marzo de 2011

Un delantal para Bea. Y otro para mi.

Pues resulta que mi hermana necesitaba un delantal para no ponerse perdida en clase de Plástica (y que conste que la maestra es ella). Y yo tenía un trozo grande de loneta con un dibujo gracioso de Ikea. Lo primero que tenemos que hacer es cortar el trozo del tamaño que necesitamos.
Para darle forma a la parte superior, utilicé otro delantal que tenía por casa. Lo puse sobre el revés de la tela y dibujé la forma para luego cortarla. Para cortar la parte inferior del delantal con bordes redondeados (no es una cuestión estética, sino que luego voy a rematar los bordes con una cinta al bies y es mucho más fácil hacerlo si la esquina es redondeada...) usé un plato.




Cortamos la tela doblada por la mitad y nos quedarán ambas esquinas igualadas.
Ahora hay que empezar a rematar los bordes del delantal. Lo mejor es usar una cinta al bies, en este caso de un color a contraste. Y del que tenía venticinco millones de metros. Empiezo rematando lo que será la parte superior de la pechera del delantal.

Sujetamos con alfileres como veis en la imagen, cosemos con un pespunte recto a la máquina y planchamos hacia el derecho.Este pespunte luego no se va a ver.


Luego doblamos el bies sobre el borde del delantal y sujetamos con alfileres por el derecho. Lo cosemos por el derecho, cuidando que esta costura nos quede derechita y mona porque se va a ver. O, como en mi caso, hacemos lo que podemos.


He cortado una pieza rectangular (de la parte de abajo del delantal) para hacer un gran bolsillo en el que guardar unas gafas, las tijeras, chuches variadas... lo que se pueda necesitar en una clase de Plástica. Le remato el bajo con un dobladillo corriente, pero por arriba lo remato con el bies contrastado (realmente, tenía un montón).


Sujeto el bolsillo a ambos bordes del delantal, a una altura en la que sea cómodo de usar.  Marco también dos separaciones en el medio. Quedará el bolsillo dividido en tres bolsillos: dos grandes y uno estrecho como para meter las tijeras.


 Coso el bolsillo con un pespunte y coso también las divisones. Ahora remato toda la parte inferior del delantal con el bies, pillando con esta costura los lados del bolsillo.

 Sólo nos queda poner el bies en los laterales, dejando dos tiras muy largas a ambos lados para atarlo sin problemas. A mi me gusta atarme los delantales delante, no detrás, así que mis tiras de atar son siempre extra largas. Cuando hago un delantal para mi, mido la parte que sujeta al cuello de tal modo que hago una única tira que va: tira de atar a la cintura-lateral del delantal-tira del cuello- lateral del delantal- tira de atar a la cintura. Pero como este delantal no es para mi, he preferido sujetar en la parte superior del pecho una anilla (fue parte de un bolso en otra vida) y dejar al otro lado una tira larga, así el delantal se puede ajustar al gusto de la consumidora.



Y este es el resultado final. Un delantal bonito, práctico y con tres estupendos bolsillos. 
 

Ahora me he quedado con ganas de renovar mi delantal, que el pobre está hecho unos zorros. Y como he encontrado en el mercadillos estos estupendos paños de cocina, muy baratos y  enormes, he pensado convertir un par de ellos en delantales. Y más fáciles de coser que el anterior, porque con este sólo hay que cortar los laterales y coser una única cinta, la que forma las tiras de atar, remata los laterales y hace la cinta del cuello. El resto del paño lo he dejado tal cual y me he ahorrado coser más remates.



Dicho y hecho: en un titá.

4 comentarios:

  1. yo quiero uno!!!
    besus
    (tu marido)

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  2. Pues en semana Santa se lo das.. .que va a bajar a verte.. jeje
    (el novio del marío)

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  3. Hay que ver, qué zorrerío tenemos montado. En fin, ya está terminado y ha quedado muy chulo. Estoy pensando que te hacen falta unos agarradores a juego. Hum, tengo que comprar guata.

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